Acerca de la terapia somática
La terapia somática considera a tu cuerpo, mente, emociones y espíritu como un solo sistema.
Cada elemento es de igual importancia y se trabaja de manera conjunta. Cuando consideras a tus sintomas y emociones como parte de un sistema interconectado, se pueden aclarar dudas y preocupaciones así como descubrir conecciones y recursos que estaban ocultos.
Tu cuerpo es tu hogar.
Cuando escuchas a las sensaciones presentes en tu cuerpo puedes conectar con tu sistema nervioso autónomo que contiene las memorias y experiencias traumáticas de tu vida. Al conectar de manera consciente y tranquila con esas experiencias puedes empezar a procesarlas y soltarlas desde su origen físico. Por esta razón la terapia somática trabaja con el cuerpo primero y después invita un proceso consciente de análisis. Hay experiencias de las que uno no puede salir pensando, se necesita sumergirse un poco más profundo a los orígenes físicos de la experiencia y con atención, cuidado y amor, encontrar la salida.
Dale la bienvenida a todas tus emociones.
La mayoría de nosotros hemos sido educados para considerar al enojo, tristeza, miedo, y ansiedad como emociones negativas que deben ser ignoradas, reprimidas y reemplazadas por emociones más positivas. La terapia somática propone que nuestras emociones negativas son en realidad mensajes de alarma que están tratando de llamar nuestra atención hacia una herida existente. Estos mensajes de alarma son una de las maneras en las que se comunica nuestro sistema nervioso. Si los ignoramos se vuelven cada vez más fuertes y pueden incluso volverse tóxicos. Si los escuchamos y entendemos su mensaje, se disminuyen y se transforman. La terapia somática utiliza una concentración meditativa, un contacto físico suave y terapia hablada para ayudarte a conectar con tus emociones a través del cuerpo. Desde esa experiencia física puedes escucharlas, entenderlas y soltarlas.
El escucharte a ti misma(o) con interés y cariño abre muchas posibilidades.
En nuestras vidas, pocas veces tenemos el tiempo o el espacio de escucharnos. La terapia somática puede ayudarte a crear una experiencia de conexión contigo misma(o) a través de tu cuerpo, en el que te sientas apoyada(o) y aceptada(o). En mi experiencia, este proceso tiene un efecto amoroso, sanador y energizante que permite tomar decisiones con confianza y claridad. Todo cambio real tiene su origen en el proceso de tomar conciencia de manera honesta y profunda de lo que estás sintiendo y viviendo.